Más allá del debate sobre si los alumnos tienen que hacer o no deberes en casa, lo cierto es que realizar las tareas escolares fuera del horario lectivo es un pilar del sistema educativo en España. Muchos defienden que los deberes refuerzan los aprendizajes de clase, que ayudan a crear hábitos de trabajo, superación y disciplina y que refuerzan la concentración y la memoria.